El taranconero que se emociona recordando el paso de la Virgen de Riánsares por las calles de Cuenca

"Un sueño hecho procesión", apuntaba Paco Arcas

El 24 de mayo participó en la procesión especial que celebraba el 75 aniversario de la Coronación de la Virgen de la Luz, Nuestra Señora de Riánsares, protectora y alcaldesa honoraria de Tarancón.

Aproximadamente 1.200 hermanos, devotos y leales acompañaron a su «Virgen» por las calles de Cuenca, expresando su fe y veneración hacia la Madre de todos los taranconenses.

Francisco Arcas Navarro lideraba la expedición, un personaje crucial en la vida religiosa y cultural. Su existencia siempre ha mantenido una relación con la Hermandad de la Santísima Virgen de Riánsares. Inició como vocal y, a partir de 2002, desempeña la función de presidente. Ha sido reelegido en múltiples ocasiones.

Paco Arcas a la izquierda de la imagen

Entrevista a Paco Arcas, presidente de la Hermandad de la Virgen de Riánsares, tras la procesión en Cuenca.

Paco, han pasado unos días desde que la Virgen de Riánsares desfiló por las calles de Cuenca.

¿Cómo vivió usted ese momento?

Fue uno de los días más llenos de emoción que he experimentado como presidente de la Hermandad. Observar a nuestra protectora, la Virgen de Riánsares, paseando por las calles de la capital, en compañía de tantos fieles, aproximadamente 1.200, fue algo inigualable. Sentí un profundo orgullo y gratitud.

¿Qué significó para usted personalmente este desfile por Cuenca?

Fue sumamente conmovedor. La Virgen de la Luz se convierte en la madrina de la Virgen de Riánsares y siempre ha estado presente en sus conmemoraciones. Recibí la llamada de Antonio Carrasco, el presidente de la Hermandad de Cuenca, para participar en la procesión y le comuniqué que estaríamos desfilando en ese lugar.

¿Qué ambiente encontró durante el recorrido?

Un ambiente de respeto, devoción y emoción. Cuenca respondió con cariño. Había personas de todas las edades, muchas con lágrimas en los ojos. La Banda de Música de Nuestra Señora de Riánsares, dirigida por Isabelo Chaves, aportó un toque armónico al desfile, logrando que la Virgen avanzara con majestuosidad… Fue una procesión que nos unió como comunidad religiosa.

¿Hubo algún instante que se le haya quedado grabado especialmente?

Al salir de la Catedral y encontrarnos con nuestros vecinos que estaban a la espera de la aparición de la Virgen, los aplausos se intensificaron. Creí que la Virgen no solo pertenecía a Tarancón, sino a toda la provincia y a Cuenca. Además, cuando algunos hermanos, con ojos llorosos, me expresaron: «Este día no se olvida».

¿Cómo valora la acogida por parte de las autoridades y la Hermandad de la Virgen de la Luz?

Fue sobresaliente. Nos acogieron con la apertura de sus brazos. Hubo colaboración, consideración y gran fraternidad. Me emocionó observar cómo el resto de las hermandades desfilaban, cómo se movieron para formar una procesión muy resplandeciente. Fue una demostración de lo que la fe puede edificar cuando existe unidad.

Imagen de la virgen en la puerta de la Catedral de Cuenca

¿Qué mensaje le gustaría dejar a quienes vivieron este momento histórico?

Deseo agradecer a la directiva de la hermandad de la Virgen de la Luz, a su secretario Antonio Carrasco, a todos los taranconeros que se congregaron para desfilar junto a nuestra Virgen, y a todas las hermandades que participaron en el desfile. De manera absoluta a los banceros y a los líderes de estos por su excelente desempeño. Al Ayuntamiento de Tarancón por sus facilidades y a la Banda de Música de Nuestra Señora de Riánsares por su trabajo, gracias a su director.

Que no dejemos apagar nunca la llama de la devoción. Que este 24 de mayo quede en nuestra memoria como un símbolo de la fe compartida. Y por supuesto que sigamos trabajando juntos para que la Virgen de Riánsares siga siendo guía y consuelo para todos, dentro y fuera de Tarancón.

Con la voz entrecortada y la mirada aún brillando de emoción, Paco Arcas resume lo vivido con una frase que nace del alma: «Ese día no solo paseamos a la Virgen por Cuenca… Fue ella la que nos paseó el corazón por el cielo. «Nunca lo olvidaremos». 

Rafael Torres

Nacido en Cuenca. Estudiante del Grado de Periodismo en 4 ° curso en la Facultad de Comunicación de Cuenca
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