Durante la celebración del Día de Castilla-La Mancha, la Junta de Comunidades concedió el Reconocimiento al Mérito Regional a la Hermandad de Nuestra Señora de la Virgen de Rus, la cual es la patrona y alcaldesa honorífica de San Clemente, en un emocionante acto realizado el 31 de mayo pasado. Este premio resalta la intensa relación de la imagen de María con la historia, la devoción popular y la identidad cultural de la población de San Clemente y de toda la comarca.
Después de obtener el reconocimiento, el presidente de la Hermandad de la Virgen de Rus, ha querido atender a nuestro medio El Digital de Cuenca. Visiblemente emocionado. Con expresiones de agradecimiento y orgullo, transmite la relevancia de este reconocimiento no solo para la Hermandad, sino para todo el pueblo de San Clemente y sus habitantes.
¿Qué ha significado para usted y para la Hermandad recibir este reconocimiento?
Es una emoción inmensa. Un gran orgullo. Recoger esta distinción en nombre de la Hermandad y del pueblo de San Clemente es un honor que se puede explicar con palabras. La Virgen de Rus ha estado siempre presente en la vida de la gente del pueblo, y este reconocimiento es un premio a siglos de fe, tradición y devoción compartida.
¿Cree que este galardón ayudará a visibilizar aún más la figura de la Virgen de Rus en toda Castilla-La Mancha?
Sin duda. La Virgen de Rus es ya un símbolo muy fuerte en nuestra comarca, pero este tipo de reconocimiento ayudan a poner en valor no solo la dimensión religiosa, sino también el aspecto cultural, histórico y social de una devoción tan arraigada. Es una forma de decirle a toda la región: aquí hay un patrimonio vivo que merece ser conocido y cuidado.

¿Qué momentos le han venido a la cabeza durante el acto de entrega?
Han pasado muchas imágenes por mi mente. La romería, las promesas, los rostros de tantas personas de la Junta Directiva, de las camareras de la Virgen, de nuestros mayores que dedicado su vida a la Virgen. Pero también los jóvenes, las nuevas generaciones que siguen acudiendo año tras año. Me he acordado especialmente de los que ya no están, pero que sembraron esta devoción con tanto cariño.
¿Cómo se vive en San Clemente la devoción a la Virgen de Rus?
Es algo que forma parte de nuestro ADN. Desde niños aprendemos a quererla, a rezarle, a caminar hasta su santuario. La romería para traerla al pueblo, la llevada, las misas, los cánticos…todo eso no es solo religión, es comunidad. Es un vínculo que nos une a todos, estemos donde estemos.
¿Qué mensaje le gustaría enviar a los vecinos, devotos y hermanos tras recibir este reconocimiento?
Que este premio es de todos. De cada persona que ha rezado una salve, que ha participado en la romería, que ha llevado una vela, que ha colaborado con la Hermandad, que ha mantenido viva la fe a lo largo de generaciones. Hoy más que nunca la Virgen de Rus nos une y nos representa.
¿Y ahora qué? ¿Cómo piensa celebrarlo la Hermandad?
No es el término celebrarlo en sí mismo. Estamos organizando un acto de entrega a la Virgen, una ceremonia de gratitud en la Salve del domingo próximo. Justo antes de que la Virgen regrese a la ermita de Rus.

Por último, ¿qué le diría a quienes no conocen a la Virgen de Rus?
Que vengan. Que se acerquen a San Clemente, que conozcan nuestra historia, nuestras tradiciones. Que vayan al santuario, aunque solo sea una vez, y verán que hay algo especial allí. La Virgen de Rus no deja a nadie indiferente.
Este reconocimiento se añade a las diversas iniciativas para conservar y apreciar las costumbres religiosas y culturales del territorio de Castilla-La Mancha. Según Emiliano García-Page, presidente regional, «la Virgen de Rus simboliza el espíritu de un pueblo que ha logrado preservar sus raíces con orgullo, respeto y devoción».
El premio, registrado el 31 de mayo, representa el agradecimiento de toda Castilla-La Mancha hacia una defensa que ha logrado superar las fronteras del calendario litúrgico para transformarse en patrimonio emocional y colectivo de toda una comunidad.